Muchas veces las actividades diarias nos dificultan ser estratégicos al nivel que la empresa necesita o cómo nos gustaría agregar valor al negocio en el que estamos.
Si tenemos la percepción que no estamos siendo estratégicos es importante que hagamos un análisis de nuestra gestión actual.
Este análisis lo podemos llevar a cabo como un diagnóstico, y este diagnóstico debe incluir una auto evaluación y una evaluación de mis clientes internos sobre la gestión.
Busca referencias de buenas prácticas, procesos y procedimientos de Recursos Humanos, luego puedo comparar lo ideal vs mi situación actual.
Elabora un plan de acción de brechas y establece cómo medirás el alcance o cumplimiento de tus metas.
No olvides buscar aliados en tu plan, no solo de tu área, sino que integren a la compañía entera.


